La obesidad puede aumentar las posibilidades de sordera en los adolescentes.

Los adolescentes obesos tienen más probabilidades de sufrir pérdida auditiva en comparación con los adolescentes delgados de la misma edad, según un nuevo estudio.

Los científicos descubrieron que los adolescentes obesos experimentaron una mayor pérdida auditiva en todas las frecuencias y tenían casi el doble de probabilidades de desarrollar el problema.

El estudio encontró que la obesidad en los adolescentes está asociada con la pérdida auditiva neurosensorial en todas las frecuencias (el rango de frecuencia que pueden escuchar los humanos). Esto es causado por el daño a las células ciliadas en el oído interno.


Las personas con pérdida auditiva de baja frecuencia no pueden escuchar sonidos de frecuencias de 2,000 Hz hacia abajo. En la mayoría de los casos, aún pueden entender bien el habla humana, pero pueden tener dificultades para escuchar en grupos o en lugares ruidosos.

La encuesta analizó datos de aproximadamente 1,500 adolescentes de la Encuesta Nacional de Examen de Salud y Nutrición, una muestra grande y representativa a nivel nacional de adolescentes entre las edades de 12 y 19 años, realizada entre 2005 y 2006. Los participantes fueron entrevistados en casa, teniendo en cuenta historial médico familiar, afecciones médicas actuales, uso de medicamentos, fumadores domésticos, factores socioeconómicos y demográficos e historial de exposición al ruido.

El Dr. Lalwani y sus colegas especulan que la obesidad puede conducir directa o indirectamente a la pérdida de audición. Aunque se necesita más investigación para determinar los mecanismos involucrados, teorizan que la inflamación inducida por la obesidad puede contribuir a la pérdida auditiva.

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